El potente pilar de Huazihul SJRC atraviesa un buen momento tras conocer su convocatoria a la Academia Oeste de la UAR. El juvenil del Cacique charló con CUARTO TIEMPO sobre su presente y futuro en el mundo de la ovalada.
En silencio y con mucha humildad trabajó para tener este presente. De a poco comenzó a ganarse un lugar en los seleccionados juveniles y de no ser por la Pandemia se convertiría en el emblema de la Azul sanjuanina.
Germán Díaz es una de las promesas del Cacique. Sin embargo, no se las cree y sigue entrenando para poder cumplir una de las metas que se propuso desde que pisó el predio ubicado en Rivadavia: “Empecé por recomendación de un amigo. Jamás pensé que el rugby se transforme en algo tan importante en mi vida. Trabajo para representar a mi club de la mejor manera en primera. Es el sueño que tenemos todos desde niño llegar al plantel superior”.

Con la alegría de saber que tiene la gran chance que tanto buscó, Germán nos contó sus sensaciones sobre la convocatoria a la Academia Oeste de la UAR: “Nunca imaginé terminar el año con una noticia tan buena. La verdad es que fue una noticia muy grata y lo tomo como una gran oportunidad para crecer como jugador”.
Con la sinceridad que lo caracteriza, Díaz analizó el atípico 2020: “Fue complicado y muy frustrante por el hecho de no poder ir al club y compartir entrenamientos con mis compañeros. De todas formas, cada uno fuimos llevándola como podía buscando entrenar con los elementos que teníamos a mano”.
El potente pilar izquierdo del Cacique quiere poner todos los cañones en el 2021: “La idea es enfocarse en los entrenamientos y el estudio. Apunto a que sea un año muy productivo en estos aspectos”.
Para cerrar, Germán Díaz contó qué es lo que más añora del rugby: La arenga antes de entrar a la cancha. Es una de las mejores sensaciones que vivo y es un sentimiento que se extraña bastante”.