El poderoso Coutras de Francia cerró con una Copa más para sus vitrinas y para ellos será una temporada exitosa. Para la jugadora que nació en Unión de Rawson será la copa con la que cierra una etapa de su vida. Itatí Clevers deja de jugar al hockey sobre patines, pasaron 29 años arriba de las bota de cuatro ruedas. Tuvo muchas alegrías y tal vez muchas de las otras. Pero se va con la frente en alto de haber dejado todo lo que tenía en cada partido que le tocó entrar al rectángulo.
-¿Te vas en seriooo?
-«Es muy cierto (mientras esboza una sonrisa) nadie me cree, pero es así en unas semanas más regraserè a casa. Fueron 29 años sin interrupciones, le pegue de corrido todos los días para el hockey».
Los recuerdos de Itatí empezaron con un dibujo. Si bien de su pasado en inferiores recuerda poco. Ese dibujo describe de cuerpo entero la pasión que siente por el hockey sobre patines y del Azul de Rawson. Por ahí empezó su relato: «Tengo patente cuando iba a la sala de cinco años para un día del padre, lo dibujé a mí papá en medio de la cancha de Unión. Mis viejos eran mucho del lema ‘primero el estudio después el resto’ . Esa regla hizo que la nena volvía de la escuela hasta con los deberes hechos para poder ir al hockey, si no me dejaban ir me moría» recordó. Esa pasión la llevó a jugar en Europa y hoy habla de su retiro muchos años despsués.
El hockey siempre es el hockey.
Pero no es todo, el hockey de inferiores en días de partido hace que toda la familia se prenda a alentar a los chicos y chicas. Los Clevers armaban todo muy temprano. Itatí recuerda que «ibamos en Citroën 3cv que teníamos que buscar a mis abuelas que eran las barra bravas de todos los domingos , 4 niños, 2 abuelas y una madre arreaba el pobre auto para todos lados. Papá como laburaba en el hockey poco nos pudo seguir».
Ella empezó en Unión, el club de su alma, no solo de sus amores. Antes no era muy común que una nena se cambie de club o que en primera haya muchos movimientos de plantilla como el hockey de ahora. Pero a Itatí le tocó cambiarse de club, si bien fue hace mucho años, ella aún toma aire para recordar aquellos momentos. Al respecto dijo que «me dolió el alma cuando me cambiaron de Unión a UVT, era una nena… temas de grandes… pero recuerdo ir a acompañar a mi papá que dirigía Valenciano , un argentino de juvenil en el estadio, época de Adri Gutiérrez y cuando llegamos estaba jugando Unión, me senté en la tribuna norte y lloraba».
Así de pasional ha sido siempre, inclusive dentro de la cancha nunca se guardó nada, eso le jugó algunos momentos que nos son gratos para los jugadores: las lesiones. Ella nos contó que siempre estuvieron presentes en su carrera, «de chiquita arranqué con lesiones.. eso me daba mucha bronca, me enojaba. Una por año desde los 9 años hasta los 18, una por año con seguridad» dijo la delantera que hizo muchos goles con la camiseta del azul de Rawson y en cualquier equipo que le tocó jugar.
La Clevers francesa, mas madura pero igual de pasional.
El inicio de Itatí Clevers fue en Unión de Rawson, después pasó a UVT. En primera hizo algunas temporadas en Barrio Rivadavia, también jugó en Concepción y la última casaca que defendió en San Juan fue la de Richet y Zapata. Después hizo las maletas y se fue a Francia para sumarse a la poderosa escuadra del Coutras de Francia.
Ahí se encontró con ella misma, maduró muchas cosas que vivió todo la vida dentro de las canchas, por eso cuenta que «acá creo que fue cuando llegué a tener digamos un “Disernimiento deportivo”, cuando caes en la real cuenta de tus puntos débiles y fuertes. Entendí que por más amor que le tenía al hockey no me iba a volver más hábil, porque eso es una cualidad con la que naces. Entonces tenía que hacerme fuerte en algo que sirviera dentro de la cancha y opté por la responsabilidad y la disciplina. Son los pilares que me mantuvieron tantos años sin ser una jugadora de grandes riquezas técnicas».
Los momentos importantes de su carrera.
En sus recuerdos aparecen muchos. Pero ella clasifica algunos y nos cuenta que «el más importante en jerarquía es sin duda la Copa Europa. Si bien mi club no lo tenía como un objetivo, sino más bien una participación, vivir en carne propia ese hockey, sentir el rigor del hockey profesional con todas las letras, este año de hecho nos tocó en la zona Gijón, que hace unos días ganó ese torneo. Que placer realmente haber disputado un partido con tremendas jugadoras. Inolvidable».
Pero también surge «el otro lindo torneo que viví fue el Panamericano con las chicas del CPC, compartí un par de meses de entrenamiento y me bastó para saber por qué siempre fueron lo que fueron. ¡Profesionales!. Aunque trajo a la charla aquel Argentino de 2015 cuando Unión era anfitrión como lo relata ella: «en 2015 creo que fue, anfitrión unión, y sacamos a CPC de semis 2-0. Histórico para nosotras y para ellas».
– ¿Que viene ahora?
-«Seguiré mi vida, volveré a buscar trabajo de lo mío. Obviamente sigo con el gym religioso y me gusta mucho andar en bici. Así que a disfrutar y repartir a otras cosas todas las energías que le dedicaba a este hermoso deporte. Siempre voy a estar haciendo. Pero ya no más colectivos».
En su muro de facebook posteó hace algunas semanas atrás acerca de su retiro. «Es hora de dar un cierre, desde el amor, desde la calma, desde el agradecimiento!
Que privilegio retirarme con 33 años, que privilegio haber aportado un granito de arena en ocasiones, que privilegio haber vivido un proceso de selección. Gracias Hockey sobre patines de mi corazón! Este amor no se acaba, TRANSMUTA 
«.
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