En el cierre de la primera fecha del Seis Naciones, Les Blues superó 37-10 a Italia en condición de local.
Sin jugar bien pero mostrando toda su jerarquía individual, los Galos arrancaron el certamen con una victoria ante la débil Azzurra, equipo que comenzó bien pero se fue desdibujando con el correr de los minutos.
Francia le costó lograr el punto bonus, pues entró en el desorden italiano. Esta vez lo salvó el olfato goleador de Gabin Villiere, quien fue letal cuando tuvo control de la pelota por la punta.
Italia fue voluntarioso. Apostando al juego corto, la visita le planteó pelea a su contrincante de turno. Además, aprovechó cada oportunidad que se le presentó el partido que le permitió liderar al tanteador durante gran parte del primer tiempo. Sin embargo, la performance colectiva bajó y los Galos torcieron la historia a su favor imponiéndose 37-10.
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