Durante dos meses todas las miradas van a estar puestas en tierras galas. La décima edición promete ser la más pareja de todas por la preparación que realizaron las selecciones del Tier 2. Más allá de los habituales candidatos, en las cuatro zonas hay equipos que pueden dar el golpe.

Cuatro naciones asoman como las principales protagonistas para quedarse con la Copa Webb Ellis. Francia, Irlanda, Nueva Zelanda y Sudáfrica son los que mejores llegan. Sin embargo, detrás viene un lote de equipos que tienen argumentos para jugarle de igual a igual. Entre esos seleccionados aparecen Argentina, Inglaterra, Escocia, Gales y Australia.

En un tercer nivel emergen Italia, Georgia, Japón y Fiji. La Azzurra cuenta con jugadores con mucha proyección que pueden explotar durante el Mundial. Los georgianos vienen creciendo año tras año y puede ser un rival duro de vencer en el Grupo C. Los asiáticos fueron una de la gran sorpresa en la edición anterior y puede tener una performance similar. Los isleños fueron grandes beneficiados con la nueva regla de elegibilidad de jugadores y sumado a la inclusión de una franquicia en el Super Rugby le permitieron llegar en óptimas condiciones.

El sueño de volver a ser historia

Como en el 2007, Los Pumas llegan con un presente que invitan a la ilusión. Con cambio de timón a mitad de camino, Argentina es el equipo que mejor llega en su grupo y clasificar como primero no debería de sorprender. Sin embargo, la verdadera historia comienza a partir del sábado a partir de las 16 horas en Marsella cuando enfrente a un rival directo y ya conoce lo que es cargar la Copa Web Ellis como es Inglaterra.

Los 33 elegidos por Cheika combinan experiencia con juventud. Tal vez la falta de variantes en la posición de apertura llevan a depender mucho de Santiago Carreras. El back cordobés es uno de los jugadores más talentosos del plantel pero fue desarrollándose en esa posición. El resto, tiene variantes de calidad y con buenos rendimientos vistiendo la albiceleste.

Argentina tiene serios argumentos para meterse por tercera vez en semifinales. Para eso debe mantener la regularidad durante el partido evitando caer en baches y cometer infracciones que lo condicionen. El camino no es nada sencillo porque debe afrontar un grupo muy físico y un posible cuarto de final con score incierto (Australia, Gales o Fiji) para toparse con uno de los grandes candidatos (Nueva Zelanda o Francia).